27 de enero de 2024 (Este relato comienza aquí ) — A esos hombres los quiero en el camión dentro de media hora. Los que ya han pasado por la mina no me sirven, haga con ellos lo que quiera. Métalos en el camión si no sabe qué hacer con ellos, pero no se los pagaré. —¿Y las mujeres? —el asiático trotaba tras el hombre rubio escribiendo a trompicones en el comunicador del brazo— —Las mujeres... tengo que verlas antes de tomar una decisión. —Por supuesto, por supuesto.
Por Olí.